Lo iridiscente: de pompas de jabón y personas que brillan

¿Qué tienen en común las pompas de jabón y los pavorreales? ¿O una mariposa azul y un CD? En todos ellos hay una pizca de iridiscencia[1], ese efecto óptico que nos hace ver arcoíris estampados en las superficies de ciertos objetos y en algunos seres vivos, sobre todo aves e invertebrados. ¿Y los humanos? ¿Acaso pueden ser iridiscentes?

Si bien es cierto que cuando uno anda por las calles de la ciudad que habita, no se cruza con personas que literalmente reflejen los colores del arcoíris -a excepción de quien va por la vida con cabellos de colores, con banderas del Orgullo LGBTTTI o con cualquier vestimenta que tenga figuritas de arcoíris y unicornios- ocasionalmente uno puede encontrar personas que brillan, brillan mucho, y no de un solo color, sino de varios.

Si lo iridiscente se produce por el jugueteo de la luz en los objetos, teniendo como resultado el reflejo de varios colores dependiendo de la forma en que se mire, la iridiscencia en las personas sería algo así como la habilidad de pintar la vida de muchos colores, pero, sobre todo, de transmitirlo a quienes se le atraviesen en el camino. Aunque suena fácil, no lo es, pues cualquiera te saca una sonrisa, pero no cualquiera te ilumina el camino para que se vuelva más bello. 

« Some of us get dipped in flat, some in satin, some in gloss.

But every once in a while, you find someone who’s iridiscent.

And when you do, nothing will ever compare ».[2]

¿Y cómo saber si te encontraste con una persona iridiscente? Tu vida ya no vuelve a ser igual, de repente, y aunque las circunstancias no cambien mucho, todo se ve diferente, mejor, más colorido; y si tienes suerte a partir de entonces y para siempre, maravillosos destellos te recordarán lo mágica que es la vida si la acompañas de pequeños detalles que le dan color, como una malteada, los ojos de un gato o el rock & roll.

Superposición iridiscente. Por Gabriela Ra. E. (2012)

_____________________________________

[1] Según la RAE, la iridiscencia es el “reflejo de colores distintos, generalmente como los del arco iris”.

[2] Frase de la película Flipped (2010). Traducción: “Algunos tenemos un acabado mate, otros satinado, otros esmaltado. Pero de vez en cuando conoces a alguien que es iridiscente y, cuando ocurre, no hay nada comparable”.